El Shiatsu es una terapia manual de origen japonés, creada por el Maestro Tokujiro Namikoshi, que aúna el conocimiento de la antigua medicina oriental y el conocimiento anatómico y fisiológico de la medicina científica. Centra su filosofía en la importancia del mantenimiento de la salud y la prevención de la enfermedad aumentando la vitalidad, aliviando la fatiga y estimulando la capacidad de autocuración del cuerpo humano.
La terapia consiste en realizar presiones con los dedos pulgares y las palmas de las manos sobre determinadas zonas y puntos del cuerpo del paciente.
Estas presiones son perpendiculares y se modulan según la respuesta de la zona que se presiona. Con ello se estimula la piel, mejora la función muscular y de los órganos y vísceras, equilibra el Sistema hormonal facilita el movimiento circulatorio. Ayuda a restablecer el flujo energético, normaliza el Sistema Nervioso y especialmente regula el Sistema Nervioso Autónomo, entre otros muchos beneficios que aporta al organismo.
El cuerpo tiene la capacidad de autosanar, es por eso que cuando nos duele alguna parte del mismo, de forma instintiva acercamos nuestra mano a la zona dolorida y nos presionamos. Es una acción que realizamos sin darnos cuenta, pero es una forma natural de aliviar el dolor. De aquí nace el Shiatsu y otros tratamientos, ya que ejerciendo presiones sobre determinados puntos, se reactiva la capacidad de autocuración del cuerpo. Por otro lado, las inflamaciones son acumulaciones de iones positivos, por eso, al poner nuestras manos cargadas de iones negativos sobre la zona inflamada, neutralizamos la carga positiva y el dolor desaparece.
TRATAMIENTOS QUE PODEMOS REALIZAR CON SHIATSU:
- Problemas del aparato digestivo:
- Equilibrar el apetito, diarrea, estreñimiento, mala digestión, gases.
- Problemas de la piel:
- Alergia, asma, flexibilidad, picor, aspereza, eczemas, etc.
- Problemas del aparato genital:
- Dolor menstrual, menstruación irregular, menopausia, síntomas durante el embarazo, postparto, etc.
- Problemas circulatorios:
- Pie hinchado, varices, calambres, retención de líquidos, pesadez de piernas.
- Hipertensión, sensación de ahogo opresión, prevención y rehabilitación de infarto cerebral, taquicardias, angina de pecho, arritmias e infarto de miocardio.
- Problemas de la espalda y hombros:
- Dolor lumbar, cervicalgia, hernia discal, ciática, limitación del movimiento y/o dolor de brazos, etc.
- Alteraciones del Sistema Nervioso
- Nerviosismo, insomnio, estrés, ansiedad, agotamiento físico y/o mental, depresión.
La técnica permite diagnosticar un problema y tratarlo al mismo tiempo, ya que el terapeuta al aplicar presiones en el cuerpo, recibe información tanto de su estado de salud, como de las regiones que presentan algún desequilibrio, así como de la localización del dolor con o sin contracturas. Y según las zonas dónde se produzcan o dónde se observen estas irregularidades, el terapeuta puede conocer si se trata solamente de un desequilibrio musculo-esquelético o si también está implicado el desequilibrio de algún órgano o víscera.
Con esta información, el terapeuta determina las pautas de trabajo necesarias, tanto en las zonas de dolor como en el origen del desorden, permitiendo al cuerpo restablecer su equilibrio natural. Esto nos permite entender que el Shiatsu es un tratamiento holístico, integral, ya que no solo se trabaja en la zona afectada, sino en todo el cuerpo. Esto se debe a que el tratamiento local, generalmente, tiene efectos temporales sobre los síntomas y no llega a curar la causa. Habitualmente los pacientes tienden a pensar que solo se les debe tratar la parte afectada o aquella que les duele. En la «Escuela Japonesa de Shiatsu» y en el Shiatsu en general, sabemos por ejemplo, que una disfunción del estómago puede estar producida por una baja función de los órganos relacionados con él, por lo que, si solo tratamos el estómago, no estamos tratando el origen del problema.
El Shiatsu puede aplicarse a hombres, mujeres y niños de todas las edades, y en cada caso se determinan los objetivos a conseguir. En las mujeres embarazadas se aplica Shiatsu durante toda la gestación e incluso después del parto, lo que acelera el proceso de recuperación y el reajuste de la cadera.
Recibir Shiatsu con regularidad, ayuda a descubrir los posibles cambios y anomalías que se manifiestan en el cuerpo. Así se impide la acumulación de estrés y de toxinas que puedan provocar la aparición de alguna patología. El objetivo del Shiatsu es mantener y aumentar la capacidad de autodefensa del organismo.
Es una terapia en la que solo se usan los dedos y las palmas de las manos, sin recurrir a maquinarias o utensilios. Tampoco se emplean puños, ni codos.
NO TIENE EFECTOS SECUNDARIOS.